A las 7h00 ya estabamos desayunando todos en el albergue.
Los peques estan nerviosos y los mayores tenemos ya ganas de llegar a casa.
Un tranvia primero y un tren despues nos llevan al aeropuerto.
El avion para Berlin lleva retraso. Pero tenemos margen de tiempo, así que . . vueltas por el Duty Free.
En Berlin, al pasar por el control de equipaje, le quitan a Mateo un bote de salsa que habiamos comprado en el mercado de Viena. Dada las voces que meteia, un poli de 1,90 se pueso alli al lado con los brazos en jarra para ver si bajaba la voz . . pero los que conocemos a Mateo ya sabiamos que no haria mucho efecto . . . Al final se lo quitan.
Como habia bastante tiempo de espera, Mateo recoge de nuevo el bote que le habian quitado y consigue facturarlo en una mochila pequeña. A Mateo me van a quitar algo!
Calor y humedad en Málaga al llegar. Acabamos de hablar con Badillo y Martin que salieron con la furgo desde Viena. Estan en Frigurgo, tomando una cervecita con Fernando (nuestro amigo alemán).
Nos recoge el hermano y el padre de Mateo y lo primero que nos dice es "Con lo bien que podiais estar en la puerta de casa comiendoos una sandía!, anda que me iba a ir yo con tó los niños . . ."
A las 22h00 llegamos los rondeños a la ciudad del Tajo. En casa de Chiqui, le espera la abuela con una tortilla de patatas y un gazpacho que valen su peso en oro . . .
